MERCEDES-BENZ Clase E 300 d
La décima generación –se dice pronto, pero ya van diez, sí– de la Clase E, no hará que giremos la cabeza a su paso. Es más, si no nos fijamos, es difícil distinguirla a primera vista de la Clase C e, incluso, de la Clase S. No tiene nada en su diseño exterior que la haga especial, pero tras haberla conducido, entendemos por qué Mercedes-Benz puso tanto interés en promocionar su lanzamiento. Sencillamente, es ‘el Mercedes’.
Representa esa berlina de toda la vida, con la que podrás viajar tan lejos como quieras plácidamente, pero que también podrás utilizar en el día a día, algo que, por longitud, difícilmente harás con un Clase S. Si a eso le sumamos que se trata del modelo más avanzado tecnológicamente de la gama, ya tenemos su razón de ser.
Respecto a la generación anterior, el nuevo Clase E crece en longitud, pero disminuye su anchura y altura. Sus 43 mm más de largo, combinados con un incremento también en la batalla de 65 mm, se traducen directamente, por ejemplo, en mayor espacio para las piernas de los ocupantes traseros. En cambio, esta modificación de cotas hace que la capacidad del maletero se reduzca en 10 litros.
En el diseño de la nueva Mercedes-Benz cobran gran protagonismo las ópticas, especialmente cuando incluyen la tecnología led como en este caso. Delante, los afilados faros atraen las miradas, tanto de noche como por el día. Un total de ¡84 led! actuando de forma perfectamente estudiada se encargan de que la iluminación sea perfecta en todo momento, evitando que deslumbremos al resto de conductores. Sin duda, de los mejores del mercado.